LA SARTEN

La mejor sartén para hacer una buena tortilla de patata es la de toda la vida, la que esta hecha de hierro y sin mariconadas de mango de baquelita.

La primera vez que entré en la cocina de un restaurante descubrí el maravilloso mundo de las sartenes de hierro de todas las formas, tamaños y colores.

Un día que puse a ayudar, mira que mi madre siempre me ha dicho que los cocinillas acaban pagándola, y los cocineros me la jugaron...me dijeron que retirara una sartén con agua del fuego... llevaba 20 minutos hirviendo y al cogerla me quemé la mano.

Aprendí una lección para siempre... no te fíes nunca de un cocinero ecuatoriano alejándose de una sartén riendose, por que cogiste la sartén...

¿Es necesario sufrir?

¿Como saber cuando hay que decir basta y dejar de soñar/sufrir?

Ahora sufro por que me siento como un niño caprichoso, un niño que no puede tener el juguete que todos los días ve, de camino al colegio...

Siento dolor...no se por que, bueno si lo se, se que sueño y eso es malo, por que no tengo los pies en el suelo, el problema de soñar es que nos elevamos y vemos una película que nosotros mismo hemos creado, los actores los que queremos ver, el guión el de mejor final y la dirección la que nosotros hemos marcado.

En el sueño como en los cines, llega un momento en que se encienden las luces y te obligan a salir a la realidad, la calle y la luz te hacen ver que eso no era más que una ilusión, un invento creado para poder evadirnos...

Yo no voy solo al colegio, me acompaña mi conciencia judeo-cristiana que es la que me hace ir por el lado bueno, la que me aparta de mi lado oscuro, de mis ganas de hacer daño a los demás y a los que quiero...

... por que quiero querer para dejar de sufrir y dejar de soñar para poder vivir...